





Si por ejemplo, he de pintar un cuerpo de mujer, primero le haré la gracia y el encanto característicos, pero se trata de infundirle algo más, de concentrar el significado de este cuerpo buscando sus lineas esenciales. El encanto sera entonces menos aparente a primera vista, pero ira surgiendo a lo largo de la nueva imagen que habré obtenido y adquirirá un significado mas total, más plenamente humano.
[Henri Matisse]